Saltar al contenido

Amistad y algunos conceptos importantes

Así como la familia, las parejas, los vínculos laborales o educativos, la amistad también es una relación interpersonal en la cual el individuo busca satisfacer ciertas necesidades.

La búsqueda de amistad

El encuentro de un amigo o una amiga se da inconscientemente pues no es una situación que se pretenda deliberadamente, si se buscara una amistad como objetivo, se le estaría dando un juicio de valor a cada persona por lo que pueda ofrecer, volviéndose una relación banal. Sin embargo, las amistades sí cumplen con una simbiosis donde el individuo encuentra aquello de lo que carece buscando la cooperación mutua para lograr un equilibrio y un complemento. Tal vez es contradictorio escuchar que de una amistad es necesario recibir “algo”, pero no se debe buscar una relación de este tipo con el objetivo de recibirlo, pues bien, hay que tener en cuenta que en la mayoría de las ocasiones no se es consciente de las necesidades emocionales y afectivas que cada persona requiere satisfacer, volviendo la búsqueda de una amistad una relación que cubra sólo lo que subjetivamente se cree necesitar.

Se puede decir que en una relación iniciada con el propósito de cubrir una carencia tal vez se reciba lo que se quiere, pero una amistad espontánea forjada con desinterés otorga lo que se necesita. No obstante, sí es posible un conocimiento personal que permita identificar aquellas carencias emocionales y afectivas, de qué manera mis amistades me pueden brindar apoyo, características que sí se pueden y no aceptar en la amistad, así también lo que se puede y no brindar.

El valor de una amistad

El ser humano llega a sentir cariño hacia aquellas personas o  cosas que experimenta con agrado. En cuanto a una amistad se refiere, las cosas agradables que brindan son el sentirnos seguros, escuchados, valorados y apoyados. 

Cómo se ha mencionado, la amistad no es una relación que se busque y se dé al instante de conocer a una persona, para que alguien realmente se considere en una relación de amistad debe sentirse seguro, pues algo que siempre busca el ser humano es evitar experiencias que hieran o que causen dolor.

El tener a una persona con quien mantener una comunicación honesta, libre y franca, con la libertad de poder intercambiar ideas, emociones, dolencias y experiencias, sabiéndose escuchado, brinda un medio eficaz de bienestar mental; el ser humano necesita saberse valioso, esto se percibe cuando se le admira, acepta, considera y  respeta, por eso es reconfortante cuando una persona a quien de igual forma se le atribuye valor nos lo brinda; aunque se busque evitar experiencias hirientes o de dolor, en ocasiones es inevitable vivirlas y cuando estas se presentan, la evidencia de amor que se recibe de aquellas personas que brindan su apoyo reconforta sin importar la magnitud de la ayuda.

¿La amistad siempre es agradable?

En cualquier relación se van a presentar insatisfacciones con disyuntivas o problemas, pues no hay ninguna relación que se denomine perfecta y así sucede en una relación de amistad, pues como se mencionó al inicio de este blog, en muchas ocasiones no recibimos lo que queremos, se recibe lo que se necesita; sin embargo, esta situación de no obtener lo que se desea puede crear sensaciones desagradables aunque el contexto sea positivo, por eso es necesario hablar de dos términos comúnmente mencionados cuando de amistad se trata: confianza y lealtad.

Se suele escuchar que la confianza y la lealtad se presentan al poder contar lo que sea a esa persona especial sabiendo que no se lo contará a nadie o saber que siempre se puede contar con el apoyo para cualquier situación que se requiera. Lo cierto es que en la realidad estas dos ideas se ven comprometidas de acuerdo a la situación que se viva y se atribuye como traición a cualquier aspecto que no cumpla con estos parámetros.

Es por eso que la confianza y la lealtad van más allá de guardar información o de cumplir con los estándares personales, la confianza que se le brinda a una amistad es la confianza que se brinda uno mismo del saber que aún cuando esa persona no realice o cumpla con lo que yo deseo, está haciendo lo mejor que puede con sus habilidades para sostener esa lealtad, manteniendo presente lo que esa considera necesario para mi bienestar. 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *