A pesar de que la psicoterapia tiene décadas reconocida como un tratamiento adecuado para problemas mentales y/o emocionales, abarca más que eso, pues a terapia acuden personas que buscan una mejora en su persona, y son valientes al reconocer que, en ocasiones, no se puede con todo y está bien pedir ayuda. Porque la terapia psicológica es un proceso con diversas técnicas que permite a una persona modificar y mejorar aquellos pensamientos, sentimientos o conductas que puedan ocasionarle malestar.
La Asociación Americana de Psicología enlista diversos hechos que se dan en la psicoterapia que nos pueden ayudar a entender que ir a terapia no tiene nada de malo, pero, sobre todo, las ventajas que tiene esta.
Cualquiera puede beneficiarse de la psicoterapia
Como mencionamos al principio, una persona puede acudir a psicoterapia por diversas razones; para tratar la depresión, ansiedad, abuso de sustancias, etc. y otras personas buscan apoyo para cambiar sus conductas o sobrellevar transiciones determinantes en su vida (mudanza, divorcio, pérdidas, cambios de trabajo o escuela, etc.). Pero también, otros motivos pueden ser la necesidad de manejar las demandas de la crianza de los hijos/as, el trabajo y las responsabilidades familiares, hacer frente a una enfermedad médica, mejorar las habilidades para relacionarse o manejar otros factores estresantes.
La psicoterapia es comprender tus pensamientos y emociones
Tener redes de apoyo en las cuales puedas confiar es importante, sobre todo cuando se atraviesa un momento difícil, pero un/a psicoterapeuta tiene la preparación para ofrecer más que escucha activa; tienen años de educación especializada en diversas áreas, capacitación y experiencia que los convierte en profesionales de la comprensión y tratamiento de problemas complejos. Diversas investigaciones muestran que la psicoterapia es efectiva y útil.
Además, la relación psicoterapeuta-paciente está basada en la confidencialidad, por lo que existe un espacio seguro (existen algunas excepciones en las que un/a psicoterapeuta tiene el deber de informar a alguien más; por ejemplo, cuando se está en peligro de lastimarse a sí mismo/a o a otra persona).
Pedir ayuda es el primer paso para comenzar a sentirse mejor
Muchas personas han intentado resolver sus problemas por sí mismas durante algún tiempo antes de comenzar la psicoterapia, pero han descubierto que no es suficiente. Decidir iniciar terapia no significa que hayas fracasado, puede haber diversas razones por las que no puedas solo/a (un componente biológico o ambiental) y no tiene nada de malo. Tener el coraje de acercarse y admitir que requieres ayuda es señal de fortaleza y el primer paso para sentirte mejor.
La psicoterapia es interactiva y colaborativa
Usualmente un/a psicoterapeuta comenzará el proceso psicoterapéutico pidiéndote que describas el problema que te ha llevado a consulta, ese sólo es el punto de partida; también recopilará información relevante de tus antecedentes, historia de otros problemas y otras áreas importantes de tu vida y las formas en las que has buscado resolver esas inquietudes. La psicoterapia suele ser un proceso interactivo y colaborativo, pues está basado en el diálogo y la participación activa del/la consultante en la resolución conjunta del problema.
El/la psicoterapeuta puede asignarte tareas para que puedas practicar nuevas habilidades entre sesiones o tareas de lectura para que puedas aprender más sobre un tema en particular. En conjunto identifican problemas, establecen metas y monitorean el proceso de psicoterapia.
Tener apertura
Un componente de la psicoterapia podría implicar la exploración de las experiencias de la infancia y los eventos significativos que impactan en tu vida. Relacionar la información de los antecedentes familiares puede ayudar al consultante y al psicoterapeuta a comprender sus percepciones y sentimientos, las estrategias de afrontamiento actuales o ver los patrones que se desarrollaron. El objetivo de que mirar hacia atrás es comprender mejor tu presente y hacer cambios positivos para el futuro.
Sin embargo, en algunos casos, el/la psicoterapeuta optará por centrarse en el problema o la crisis actual que te lleva a pedir su ayuda, y no indagar en el pasado. Aquí aprenderás cómo incorporar técnicas y usar herramientas que te ayudarán a cambiar tus pensamientos o comportamientos actuales que contribuyen al problema.
La psicoterapia no es para siempre
Todos se mueven a un ritmo diferente durante la psicoterapia, es un proceso muy individualizado y personalizado. Por ejemplo; en un estudio, la mitad de los/las pacientes en psicoterapia mejoraron después de solo 8 sesiones, mientras que el 75% había mejorado a los seis meses. Es algo de lo que tú y tu psicoterapeuta pueden hablar en las sesiones iniciales al desarrollar un plan de tratamiento. El objetivo del psicoterapeuta no es mantener consultantes para siempre, sino empoderarte para que puedas hacerlo mejor por tu cuenta.
La psicoterapia es confidencial
Recuerda que la psicoterapia está sujeta a las normas de confidencialidad. Solo tú puede divulgar tus registros de salud a alguien más. Los únicos que saben acerca de las sesiones de psicoterapia son tú, tu psicoterapeuta y cualquier persona a quien le des la aprobación para que tu psicoterapeuta hable (como un médico, un grupo de psicoterapeutas de apoyo o un familiar).
Fuente: APA. (2018). Get the facts about psychotherapy. Disponible en: https://www.apa.org/topics/psychotherapy/myths#
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